lunes, septiembre 13, 2010

Movilgrafías: "¿Qué hacemos con la rana?"




En relación y como complemento a la pasada entrada, confirmaremos que todo en la rana es complicado; no sólo su dibujo sino su naturaleza completa y por tanto, las acciones a las que la sometamos: atraparla, inflarla metiéndole por el culo una pajita, arrancarle las ancas para devorarlas… Hasta arrojarla a la basura es un asunto de difícil consecución. Así ha ocurrido con esta rana-silla, rana reidora, rana maléfica con la que no supo qué hacer su dueño hasta que agobiado, la dejó al lado del contenedor. Un tormento que debió soportar durante seis horas para acabar cargándole a otro su rana-mochuelo. Y es que a poco que las dejes, las ranas te organizan un infierno.

2 comentarios:

Óscar Maif dijo...

Ante semejante dilema yo optaría por darle al batracio cristiana sepultura, que hay que cavar poco.
Y la silla la vendía por ebay, para comprarle unas flores.

El Abuelito dijo...

...y no digamos lo dificultoso de crucificar una rana, como hizo en ceremonia hechiceril el mago Aleister Crowley, a fin de desterrar para siempre el Eón presidido por Cristo...