miércoles, septiembre 30, 2009

El Factor Humano, 1











"El pañuelo de Manuel"


Era una mañana de sábado.
Hacía sol.
Paseábamos por la Vía Verde.
Nos cruzamos con una familia.
Un matrimonio con dos niños pequeños.
Los dos niños iban montados en bicicleta.
Más adelante, había algo tirado en la senda.
Nos encontramos un pañuelo.
Un pañuelo blanco, doblado, planchado.
Tenía un nombre bordado en azul: Manuel.
Letra inglesa.

—No lo cojas. Lo mismo está lleno de mocos.

Lo dejamos donde estaba.
En el centro del camino solitario.
Terminamos el paseo.
A lo lejos vimos al matrimonio.
Estaban a la espera.
Llegamos a su altura.

—Perdonad. ¿Habéis visto un pañuelo?
Un pañuelo blanco que tiene bordado un nombre.
Manuel. En azul.

Yo estaba situado detrás de mi mujer.
No le veía, por tanto, la cara.
Supuse que había dicho que sí.
O que no. Con gestos.
Ella creía a su vez que yo había dicho algo.
Que sí o que no. Con gestos.
Pero ninguno dijo nada.

El hombre nos miró sorprendido.
Su mujer nos miró furiosa.
Seguíamos en silencio.
Debieron pensar
O que no entendíamos su idioma.
O que éramos sordomudos.
O que éramos idiotas.
O que nos habíamos quedado con el pañuelo.
Nos marchamos sin abrir la boca.
Oímos algo.
Hablaba el marido, resignado.

—Era un recuerdo. Lo bordó mi tía Carmen.

El pañuelo nos pesó como hecho de cemento.
También la mirada de sus dueños.
También nuestro humano comportamiento.
O sea, inexplicable.

Todo el mundo por la tarde vio luego el pañuelo.
El aire lo había desplegado.
Manuel en azul sobre el lienzo blanco.
El pañuelo aguantó otros días de sol.
Tal vez lluvia.
Tal vez viento.
Se ensució.
Perdió el azul del bordado
.
Fernando lo escondió debajo de una piedra.
Una piedra triangular.
Ahora la piedra tiene nombre.
Se llama la Piedra del Pañuelo de Manuel.
Está cerca del puente.
Me gustaría que Manuel lo supiera.
Y que nos perdonara.

1 comentario:

MJ dijo...

qué bonito, me ha gustado mucho